La verdad es algo a medio camino entre lo que piensas tú y lo que pienso yo
-Si crees que no tengo razón, dímelo-
me dijo pasándome la patata caliente de la verdad que es algo con lo
que cualquiera puede quemarse.
Porque lo que pensaba ella era
totalmente distinto de lo que pensaba yo. Pero no teníamos jueces a
mano. Aunque los hubiéramos tenido hubiese sido otra persona como
nosotros. ¿Y qué o quién da la razón? ¿Cuando tenemos la VERDAD
en nuestras manos y podemos cogerla del cuello y levantarla en alto
mientras llamamos a todo el mundo para que vea que la hemos cazado
como a un conejo?
La verdad de ella eran
una mezcla de sus intereses con sus convicciones aprendidas a lo
largo de su vida. Mi verdad era lo mismo pero en el lado opuesto del
ring. Ella decía blanco y yo decía negro. A veces yo decía negro
sólo porque ella decía blanco pero esperaba que ella dijera negro
para rápidamente cambiar y apostar por el blanco.
Si no recuerdo mal fue
Hegel el que dijo que el conocimiento se alcanza por la
contradicción. Lanzas una tesis, luego llega la antítesis y en
mitad de esa lucha de contrarios está un nuevo conocimiento
aprendido. De la guerra entre dos naciones salen grandes avances
científicos, de la lucha entre un partido gobernante y la oposición
salen algunas reformas en forma de limosna para los ciudadanos(como
en mi país los dos partidos más importantes son parte de la misma
basura no hay ni limosnas), de la lucha entre una pareja salen las
mas bonitas reconciliaciones. Todo eso cuando hay un equilibrio.
Cuando la diferencia entre los contendientes es muy grande la verdad
es lo que le sale de las narices al ganador.
- Pero dímelo porque no me enfadaré.
Y si digo que tiene razón
pero yo también la tengo me llamará blando, resoplará, dirá que
saco balones fuera o que no enfrento la verdad. QUE NO ME MOJO. Y
tendrá razón pero de una forma que me acusará.
- Porque te he dado argumentos.
La escuela de los
sofistas decía que no era importante tener la verdad, que con
parecer que la tuvieras ya podías ir tirando. Y estoy de acuerdo con
ellos. No tenemos verdades. Tenemos argumentos para defender lo
nuestro y así poder seguir cultivando nuestro huertecito.
- Así que... Dílo. A mí puedes decírmelo.
Y entonces la miré y
pensé que me caía bien y que recientemente me había vuelto a
discutir con otra persona porque yo siempre tengo argumentos para
defender lo mío pero no basta para que alguien en algún lugar se
enfade sólo por eso, por no darle la razón(ya contaré mi última
lucha por enfrentar mi verdad a la de otra persona). Aquí opté por
el armisticio y dije:
- No puedes tener más razón en lo que dices- y mientras decía esto me sentí un poco mal porque sentí que estaba mintiéndole del todo.
La verdad es la evolución
de la humanidad a lo largo de sus luchas. Parece que no podemos
avanzar si no hay follón. Toda época tiene su dosis de todo.
Nosotros ocupamos nuestro rol como el que toma su asiento. Hay para
todos. Derechistas, izquierdistas, enamorados, fríos, asesinos,
pacifistas, ecologistas, contaminadores, pederastas, anti-pederastas
y así a lo largo de la cadena con sus respectivos puntos
intermedios. Y entremedio la especie humana que avanza hacia un punto
del que poco o nada sabemos.
-Espero que no me hayas
dado la razón como a los locos.
No, le dí la razón
porque me daba igual.
Decía que "Les
Miserables"(la película) era el mejor musical de la historia.
Comentarios
Completamente de acuerdo con el anterior planteamiento, aunque a mí de poco me sirve porque mis argumentos siempre me los tumban...
En cuanto a la película no la he visto ni la voy a ver pues odio los musicales, y que los lleven al cine me parece peor!!!
BEP y feliz inicio de semana
La película le ha gustado a mucha gente así que no digo nada pero a mí me martirizó en la butaca. No podía soportarla, me ponía de los nervios y estaba mal dirigida, sólo se salvaban un par de temas por la expresividad de los actores. Besos.
No se si es la mejor película musical de la historia, estas afirmaciones radicales, siempre llevan un poco de mentira, o exageración dentro, como un modo de sentirnos seguros con categorías cerradas, pero ciertamente me gustó mucho, pero eso ya lo sabes y que a tí no tambien, lo sé yo.
No discutiremos por esto, no vale la pena, pero que no se note.
un beso
De entrada, los musicales no me gustan casi nada. Algunos he visto, pero es que son tan bonitos que suelen empalagarme. Respecto a la verdad o la mentira. Casi todas son subjetivas, salvo esas incuestionables como que algún día moriremos, el sol que sale cada mañana o que nada puede ir más rápido que la luz. El resto es incertidumbre, opinión, sensación, media verdad, mentira piadosa o burda patraña. Y depende de cada individuo, del momento o del interés. Gebbels era capaz de convertir mentiras en verdad, a base de repetirlas incansablemente y controlar los medios de comunicación, era mentira pero la gente creía que era verdad.¿Qué diferencia hay?.Su ejemplo cundió y su legado continúa. Así que no aspiro a la verdad, me conformo con cultivar mi propio criterio y confiar en él para continuar con mi pequeño huerto y cultivar mi bienestar y el de los que me importan, en la medida de lo posible. Sin perder el humor ni tomarme demasiado en serio.
UN ABRAZO
Sobre el tema de los musicales, no he visto muchos, pero es que no me gustan nada o casi nada, incluso cuando era pequeña y se ponían a cantar en mitad de los dibujos animados me fastidiaba mucho, pero he oído que este es uno de los mejores, pero seguro que no iré a verlo.
Sobre la verdad, yo creo que cada cual tiene su versión de los hechos mas que verdades o mentiras, las verdades a veces son muy jodidas y dolorosas, a veces es mejor buscar atajos menos dolorosos.
Que bien leerte de nuevo,me apetecía devolverte los comentarios que sueles dejarme en el blog.
Besos!
Los musicales ni sí ni no, alguno me ha gustado, peroe ste llevaba cuarenta minutos en el asiento y pensaba que eran dos horas. Y a la gente le gustaba y yo no lo entendía. La música no me gustaba, la historia me la sabía de memoria y la dirección de la película era sosa. Los actores bien aunque el gran Russell Crow no sabe cantar(mejor que solo actúe que eso lo hace muy bien).
Besos.
y ahí, te guste o no, sí que tendrás que darme la razón.
Imagino que como tú dices, es cuestión de lo que has ido viviendo.
estoy muy de acuerdo con todo lo que has escrito, me gusta tu "verdad" y en este caso la comparto.
No he visto los miserables, así que no puedo aportar nada respecto a ello.
El fin de semana pasado sí que vi otro musical: El Rey Leon y como no puedo comparar, para mí sí que es el mejor musical que he visto, porque no he visto otro (en vivo y en directo). Pero tampoco llegó a cubrir mis expectativas.
Bss
Pd.- A veces "mentir" para darle la razón a alguien es la única opción, pero al igual que creo que no existe una verdad única, también pienso que las mentiras siempre acaban saliendo a la luz.
Últimamente andas algo filosófico. Pero bien, al más puro estilo Fante cuando quería y no podía, escribir, o cuando ansiaba dejar de leer los otros para ponerse verbos a la obra e intentar ser uno de ellos. Siempre acababa en el bar, buscando contarle a alguien las cosas buenas de los filósofos de ideas errantes que eran aquellos nacidos en el quinto pino griego, o algo así. Quiero decir, (que me lío) que por mucho que filosofees, no pierde interés tu escritura. Quieres saber más cuanto más te adentras en la historia. Además, no sé si te das cuenta, pero hablas de muchas cosas en poco espacio, y eso, créeme, no todo el mundo sabe hacerlo...
Y a mí no me gustó nada de nada Los Miserables. Los musicales no me van. Y mira que he visto unos cuantos. Las películas cantadas, no me me llegan, ni me llenan cuando consiguen despertar algo en mí. Abro un ojo y tapo un oído, y acaba la película y ya. Pero otra cosa bien diferente son las películas sobre músicos chalados, o cuerdos, que nos cuentan sus vicisitudes y no nos cantan sus miserias: Shine, Amadeus, el documental sobre ANVIL (que te recomiendo enfáticamente) o el otro documental sobre Lemmy, de Motorhead.
Sergio, antes de acabar este comentario, quiero darte las gracias por tu generosidad comentando en mi relato, por tu forma de ser, por tu amistad escrita, por muchas cosas, vamos. Y, sobretodo, por contar las cosas como las cuentas. No dejes de hacerte letra.
Un abrazo
Mario
http://www.youtube.com/watch?v=M36uy2IGQLY
Empezaré con lo menos importante: prefiero My Fair Lady o 7 novias para siete hermanos, por poner dos clásicos.
Y mi sistema es dar la razón en todo lo que no me afecta ni me importa y reservarme para lo que me afecta y me importa... Sería un método perfecto sino fuera porque lo que me afecta y me importa varía de un día a otro y de un momento a otro, dita sea!
un abrazo,
rafarrojas
Los miserables... Qué mal me sentó ese musical. Desde luego sí apunto tus consejos sobre documentales de músicos. El de Motorhead promete especialmente. Me lo imagino como una fascinante vida al límite. el de ANVIL también caerá, por supuesto.
En cuanto a lo de nuestro país me temo que soy más crítico con lo propio que con lo ajeno. Será que me duele más, a ciertos padres les pasa con sus hijos.
Gracias a ti por tus más que generosos comentarios. Valen mucho viniendo de quién vienen. todavía recuerdo ese relato sobre desahucios al que le ha dado muchas vueltas esta semana en mi cabeza. Un abrazo.
Esos cambios de ideas que te afectan me parece que yo también los tengo a diario. Al menos flexibles si que somos.
Un abrazo.
Un equilibrio es fundamental y
la pretensión de llegar a reconciliar las ideas, también.Hay quien se coloca al inicio ya en una posición de fuerza inamovible y entonces resulta imposible.
Nunca creí en eso de que "si uno no quiere, dos no discuten"...
Tampoco puedo entender a quienes rompen sus "relaciones" -no necesariamente amorosas- por no soportar que los demás expresen libremente sus pareceres(distintos a los suyos, faltaría plus!)...
Me ha gustado muchísimo esta reflexión contada desde dos puntos de vista.
Un abrazo fuerte S.
Un abrazo, Daltvila, me alegra que hayas vuelto a lo de los blogs. Bueno, tengo que mirar todavía en tu espacio pero imagino que sí.
Saludos.
Creo que lo de la culpa es invento católico o similares. Si la verdad absoluta no la tiene nadie es difícil decir si hay un culpable. Desde neustro punto de vista subjetivo si encontramos culpables. Suelen ser aquellos que piensan distinto a nosotros o hacen lo que no queremos que hagan.
Creo que la vida es un camino largo, largo... que es lo único que tenemos y encima es incierta su duración, y que el fin es el amor. Amor filial, amor a la amistad, amor supremo a una pareja...
Estoy de acuerdo en que los culpables solo lo son desde nuestro punto de vista subjetivo. Daría para hablar sobre asesinos y ladrones pero incluso este tema es más complejo de lo que parece.
Dejar de culpabilizar a los otros y a uno mismo es difícil pero ahorra muchos disgustos y enfados.
Supongo que el último sentido biológico de la culpa es que no lo arrasemos todo y haya un cierto orden.