Y perdónanos señor, así como nosotros perdonamos a...
Tuve unos obreros haciendo la portería el mes pasado. Una
orquesta de un tipo cantando Los Chunguitos con acompañamiento de fondo de
martillos y taladros. Una delicatesen para los amantes del ruido de buena
mañana. Pero el espectáculo acabó, todo tiene un final. Hubo alguna polémica
vecinal con los buzones. La gente no soportaba que ahora se abrieran hacia
arriba. Se habían pasado la vida abriéndolos hacia un lado. Y claro, el nivel
intelectual de mis vecinos no es alto o bajo, es decrépito. No les metas
desafíos así. Son gente muy mayor cuya mayor gimnasia mental es entender qué
hace o deja de hacer el vecino teniendo como única referencia la maledicencia y
la siempre socorrida mirilla. Y de entre ellos voy a devolver hoy al
escenario a la señora Teresa, una vieja
conocida de este blog. Es de la joven generación del edificio, apenas sesenta
años, todavía tiene el cerebro afilado. Muy “querida” por mí y sobre todo por mi
compañera por meterse en nuestra vida e inventarnos historias durante un
tiempo. Hasta que la vida le dio un golpe. Se le murió el marido. Se la veía
derrotada por eso. Decía que la soledad era muy mala y aprovechaba cualquier
encuentro para llorar un rato. Sí, seguía metiéndose en nuestra vida pero
menos. La maldad se le había desactivado algo. Ya no colgaba cartelitos en la
puerta avisando sobre lo terrible que era su familia o cualquiera que a ella le
pareciera el demonio en mitad de sus delirios paranoicos (¿pero quién cuelga
carteles en el vecindario explicando lo malas que son sus hermanas o cuñados?).
Entre otros asuntos. Ese marido que la dejó tan sola la dejó también más débil.
Empezaba a darme pena. Como mi vecino de arriba. Creo que no lo menciono desde
que su hijo y yo casi volvemos al ring de las hostias callejeras hace más de un
año. ¿Más de un año ya? ¿Y luego nada? No realmente. Porque después de aquello
su padre tuvo un ataque al corazón y problemas con el riñón. Eso le impidió
trabajar con chatarra sobre mi cabeza a las tantas de la mañana. Ahora está tan
ocupado manteniéndose vivo que también nos deja vivir a nosotros. Y el hijo vive
tan preocupado que me rehúye la mirada, no quiere más campeonatos a golpes por
el título para el más cafre del año. Y desde luego yo que no tengo chimenea no
voy a hacer leña con los árboles caídos. Mejor apartarse si la carretera está
libre y no entretenerse mucho con el pasado miserable.
Todo iba bien entonces hasta que Teresa regresó. Se recuperó
de lo de su marido. Y comenzaron los ataques contra mi compañera esta vez.
El cantante de Los Chunguitos había cogido el felpudo de
nuestra casa y lo había metido en los bajantes de la comunidad sin avisarnos.
Como no sabíamos dónde estaba le preguntamos a la presidenta pero dijo que “ni
idea”. Y era cierto. La única que sabía lo que había pasado con el felpudo era
doña Teresa que por todo se interesa. Otra vecina esclareció el asunto.
Resulta que la susodicha ha bajado últimamente por mi
rellano porque si no, no se explica qué hacía en un lugar que no es ni zona
común, el ascensor le pilla lejos de mi casa. Al parecer abrió la puerta de los
bajantes, sacó el felpudo y otros trastos que decía que eran de mi mujer (falso,
no meteríamos en un lugar tan cucarachero trastos ni a punta de pistola) y dijo
es “Es de L. es de L. a la basura con eso”
(L. es mi compañera). Porque sí. Porque lo vale. Porque se cree dueña del
edificio y parece su inspectora. Tiró el felpudo al contenedor más cercano. Para ella el concepto
“habla con la presidenta si tienes un problema con el vecino” no existe. Y es
una lástima porque yo estaba tranquilo y no me meto en nada ni con nadie pero
luego, cuando entran en mi territorio soy un poco bestia. No creo en lo de la
otra mejilla, he superado la tradición judeocristiana desde que era un crío.
Creo que la gente muchas veces te dice que dejes pasar las afrentas por
cobardía o pereza pero no por bondad. Yo para vengarme no soy ni cobarde ni
perezoso. Le hago un bien social al mundo si paro a mis ofensores. Y soy
persistente y tengo una mente creativa (la parte del cerebro que activas
generando maldades es la misma que te hace escribir novelas). Porque… Bueno,
por ahí dicen que no hay que desearle el mal a la gente. Pero hay gente que
cuando está mal te permite vivir y luego, cuando se recupera y está bien, solo usan
su salud para acabar con la tuya o hacerte un mal. ¿Se supone que no hay que
hacer nada con esa gente? Por favor…
Comentarios
Y respecto de los vecinos, la propiedad horizontal es uno de los grandes peligros de la sociedad moderna. Sólo te digo que tengo un vecino que se cagó en el ascensor. Borracho. Repugnante.
Si encuentras formas creativas y dentro de la legalidad para una venganza, comparte.
Un saludo.
Maloles.
muchos ánimos.
En el fondo creo que el mundo ya está demasiado lleno de mierda (violencia) como para poner nosotros más. Y eso que estoy en parte de acuerdo contigo en que hay gente que parece no entender otra cosa, triste historia. Y si pudiera hacer escarmientos justos y medidos, parar golpes provocando que le doliera haberlo dado, en plan Superman contra el que se estrella el puño del malvado y se rompe, lo haría seguro (hasta lo provocaría). Pero ni yo soy Super, dita sea!, ni las peleas son de peli que acaba bien...
La misma parte del cerebro que imagina cuentos imagina cuentos de terror, sangre, odio, venganza... Pero como vago que soy rara vez los escribo y mucho menos los vivo.
Aunque ya pienso bien de tí, ya lo sabes, me encantaría convencerte con este rollo de curilla soplagaitas que te he soltado, y que le dieras una oportunidad a todo lo bueno de la vida. Eres un tío listo: emplea esa inteligencia en encontrar la forma de llevarte bien con esos gilipollas. Que donde haya guerra, yo ponga paz, decía San Francisco, enorme tipo guay.
Y como resulta más fácil saltarse al p google siendo anónimo, hay va un anónimo de rafarrojas, your friendly neighbourgh
Vamos... que tienes razón que pararles es un bien :P
;))
Bss Sylvia
Rafarrojas: Pues menos mal que no ibas a aportar nada... Hay tela que cortar en lo tuyo. ¿Te quedarías a temblar delante de una señora como esta? No lo creo. Es más peligrosa cuando no la tienes delante y se dedica a inventar historias sobre tí. Pero sí, claro que podría hacerte caso. Admito que lo he pensado. Cuando ya tenía bastante con el vecino de arriba le he dejado pasar unas cuantas pero es que ella no aprovecha para perdonar nada. Te confunde con un idiota con el que puede hacer lo que quiere y regresa. Y eso es más fuerte que yo. El mundo que me propones de paz y calma creo que es ese que nos gustaría a todos pero algunos no quieren jugar a lo mismo. Y mi cerebro reptil es grande. Aunque tampoco creas que voy a ejercer violencia física contra una mujer(no creo que lo hayas pensado pero por si acaso). No sé. Lo de poner esa paz franciscana me ha funcionado con otras personas más normales. La vía diplomática te lleva a vivir más tranquilo y feliz. Hasta que se agota. Pero vamos, que no estoy desacuerdo en nada de lo que dices. Sólo me falta más práctica o bajar el nivel de testosterona. Saludos, Rafa, puedes seguir con tu anonimato cómodo, incluso así eres inconfundible.
Sylvia: Veo que también te has hecho anónima pero no tanto que no te no conozca. Cuánto tiempo. Qué sorpresa es cuando veo a alguien que no sabía por dónde andaba pero recordaba muy bien.
Pues sí, hay que pararles si se puede y se tienen las fuerzas adecuadas. Y claro, como le decía a Rafa, después de agotar la vía diplomática. Mi gran problema es que paso por la vida de los vecinos diciéndoles hola y adiós y algunos parecen sentirse ofendidos por no pasar a comentar la última borrachera del de arriba o el por qué otro aparca su bicicleta dónde no debe, etc. A veces estar inmóvil o no hacer nada también es ofensivo para algunos. Besos
nadie se mete conmigo
nadie vive con nadie
más que con ellos mismos
Un placer siempre es leerte
me divertí mucho leyéndolo el otro día pero me faltaba tiempo para comenta. Ahora vengo de casa de Maman..y he querido volver para decírtelo.
Bona nit
me divertí mucho leyéndolo el otro día pero me faltaba tiempo para comenta. Ahora vengo de casa de Maman..y he querido volver para decírtelo.
Bona nit
me divertí mucho leyéndolo el otro día pero me faltaba tiempo para comenta. Ahora vengo de casa de Maman..y he querido volver para decírtelo.
Bona nit
Yo soy como tú, no me meto con nadie. Intento no traspasar jamás el "espacio vital" de mis congéneres, ser respetuosa, paciente y sobre todo aguantar el tipo en según qué situaciones...Pero claro, que se metan en mi vida...y una vecina!!! grrrrrrrr!!!! a la yugular...
Mira...yo me he dado cuenta (y eso uno lo ve cuando te toca de lleno, porque siempre es muy bonito decir que uno ha de tener paciencia y bla bla bla, que la gente esto y lo otro...y más bla bla bla...qué probecitos...pero cuando le toca a uno....ayyyy!!! entonces es otra historia, claro!) que las personas no cambian.
Que cuando la peña es mala...mala de tener esa mala sangre que les corroe, que lo ves es sus maneras y en todo lo que hacen, que ya les ves esa mirada que es un conjunto de odio/malicia/envidia/. No sé un conjunto de todo, pero que son malos y punto. Y es igual que la vida les de del revés o del derecho, eso todavía les hará más malos.Y volverán al ataque con más ímpetu.
A mi esta gente no me da pena y a veces necesitan un poco de su propia medicina, porque verán que contigo no pueden e irán a por otro desgraciado que les "tenga" más aguante.
La sociedad en la que estamos es del dicho "tonto el último" y ahora la cosa se acentuó. Y gana el que llora más pero jode mejor a los demás.
Y los que decimos las cosas claritas, pero jamás empezamos una pelea somos los que la liamos...y eso no es verdad.
Pero bueno...que vecinos, gente, colegas y demás...que nos rodea han y hemos de convivir con ellos...así qué...no sé si decirte que le metas más paciencia o que hagas lo que maquines.
Al final el cuerpo te dice si tienes más pilas o no para seguir con tonterías.
También he aprendido algo...(es la edad, eso seguro) no volveré a tener una propiedad en mi vida...un alquiler!!! si no me gustan los vecinos me las piro y punto...como hice ahora últimamente...que horror esa pareja que día sí y día también se mataban...al final Sergio una noche a las dos de la mañana me levanté y aporreé su puerta a gritos!!! Y la muy....brrrrr!! no voy a dejar insultos en tu blog...se puso chula conmigo (es ella que le pega a él). Pero cuando le dije que la iba a tirar escaleras abajo...uyyy! ahí se calló...luego pasé al ataque de la pena...y le dije que eran unos pobres desgraciados y que por favor se separaran que nadie tenía derecho a tratar a nadie de esa manera cómo ellos se trataban...y que yo quería dormir por las noches...qué lástima...
Pero vaya...que me entraron unas ganas de agarrarla por el cuello...
Bueno...me he quedado otra vez despachada a gusto en tu blog...
no me dejes comentarte que te saturo...jejeje
Besotes...a ver si te dejan tranquilo!!! Muaaa!!!
Tu historia de la vecina... No puedo dejar de comentarla porque lo llevo hablado con varias personas y todos coincidimos en algo. Todos estos que nos van buscando, que atacan, que son malos en invención de mentiras, cotilleo, etc. Toda esta gente tóxica tiene algo en común y es que son muy cobardes. Atacan porque están acostumbrados a que les dejen. Nuestra sociedad rehúye confrontaciones y a eso es a lo que están acostumbrados. Si encuentran alguien que les enseña los dientes se repliegan. Tu vecina cumple clarísimamente con esa teoría. Ahí queda dicho.
Saludos desde este tórrido verano(de momento en tregua aunque sólo sea por el calor).
Por la hora en que te leo no puedo comentarte como quiero , volveré a la tarde porque aquí, en tu texto me explico por si hay malos entendidos, hay mucha lengua que cortar
paciencia santo S
besos
Oye y gracias por tu comentario último, iba un buen consejo incluido que he puesto en mi facebook para que todo el mundo (bueno, mis amigos) lean a un amigo inteligente y que me ha ayudado.
Besillos grandes.
Vivo en un pueblo pequeño, de esos en que nos conocemos casi todos, por lo tanto o la convivencia puede ser un "paraíso" o un auténtico "infierno"
Por todos los vecinos que he tenido he llegado a una conclusión: los que más se meten en la vida de los demás son o las personas mayores y las amas d casa ( no meto a todo el mundo en el mismo saco ojo!!!) por una sencilla razón : demasiado tiempo libre!!!!
Las personas que están todo el día trabajando ni tiempo tienen ( tenemos a disfrutar de pleno nuestra vida, como para andar tocando las narices a los demás)
He tenido vecinos de todo tipo pero siempre hice caso al consejo de mi abuela cuando me casé
- Ojo con los vecinos te dan la bienvenida y se piden un asiento en el sofá de tu salón y una silla en la cocina. No pidas ni un gramo de sal , etc... que luego si un dia no tienes ganas de aguantarl@s te pondrán de vuelta y media cuando no te harán la vida imposible ..
así que aunque no tengo mucho trato, solo el cordial .. vivo de p. madre y te aseguro que en mi comunidad hay much@ toca huevos con perdón
un beso y feliz finde
ABRAZOS
No te atormentes la vida por pequeñeces ni desperdicies tu tiempo en cosas ni en personas que no valen la pena, lo único bueno de tus rabietas son estas historias maravillosas que nos relatas tan bien, nos entretienen y a mí por lo menos, siempre me pones una sonrisa en los labios que me dejan con buen sabor de boca todo el día.
Besos BEP
Hay gente desequilibrada y además mala con la que es mejor ni rozarse. Pero parece que buscan para utilizar de saco de boxeo al otro para sacar toda la mierda que llevan dentro.
Saludos
Saludos